Tras el final de la segunda temporada de "The Walking Dead", el showrunner Glen Mazzara habló con Entertaintment Weekly para tratar de responder a algunas de las preguntas que el episodio y la temporada han creado. Tras el salto, Mazzara habla de todo eso y de la tercera temporada.

¿Cuántos zombies estimas que fueron asesinados en la finale?

No los suficientes.

Basándonos en su discurso, Rick está en un lugar más oscuro que antes. ¿Está empezando a tomar responsabilidad?

Creo que siente que se ha sacrificado por el grupo y ellos no lo aprecian. Su confesión a Lori no obtuvo la reacción que esperaba. Pensó que ella le apoyaría, pero reaccionó de modo que le hace sentir odio y disgusto. Creo que eso le afecta, teniendo en cuenta que acaba de matar a su mejor amigo. Está lleno de dolor, pero intenta mantenerlo en secreto. Abre su corazón a su esposa, y no va bien. Así que creo que ha terminado con esta gente. Creo que no quiere ser el líder. Y les dice eso, que si no les gusta, son libres de marcharse. Es interesante eso de cara a la tercera temporada, porque habrá antagonistas a los que deberá enfrentarse.

¿Cuál es tu visión del papel del Gobernador en la serie?

En el cómic, es un villano. En la serie, claramente, lo es también. Podría no serlo tan aparente como en el cómic. Ciertamente daremos un giro a eso. Pero tenemos un personaje dinámico y atractivo que nos emociona traer a la tercera temporada. Esperamos contar la historia de dos grupos de gente: los supervivientes de Rick y la gente del Gobernador en Woodbury.

David Morrissey, quien dará vida al Gobernador.

Es interesante, porque una de las críticas a la serie es que parece herméticamente sellada sólo con los personajes del grupo de Rick.

Creo que ya menos contado nuestra historia sobre ese grupo, sobre el triángulo amoroso, encontrar un lugar seguro, la vida en la granja... esa historia ha tenido tiempo de pantalla más que suficiente. Ahora, avanzando, queremos abrirnos. Introducir nuevos personajes, historias, localizaciones, dinámicas. Creo que el año próximo resultará una serie radicalmente diferente. Mejoraremos drásticamente el ritmo. Tendremos a los personajes y contaremos historias sobre ellos. Todo hasta ahora ha sido un calentamiento, y creo que nuestros mejores episodios están por llegar.

Entrando como showrunner a mitad de temporada, ¿cuáles son los pasos que tuviste que dar?

Mi primera preocupación era devolver a Rick al frente. Es el líder, y debemos preocuparnos por él. En "Nebraska" reduje la acción zombie para centrarnos en Rick como personaje. Toma una decisión clara al disparar a esos tíos en el bar. Eso abre el mundo e introduce nuevas amenazas. También quería resolver el triángulo del modo más atractivo y activo posible. Quería poner más cosas en juego, matar protagonistas. Quería que el mundo que les rodea pareciese amenazante. Y sabía que nos acercábamos al climax de la invasión en la granja. Me alegra decir que todos apoyaban esto. Y creo que contamos esa historia, una historia que en seis episodios ha mostrado a críticos y fans que tiene potencial. Parte de eso significaba quemar lo anterior, y dejar a los fans preguntándose qué vendrá después. Esa es la mayor pregunta tras la finale. Los personajes y los fans se preguntan eso, y nosotros, como guionistas, deseamos responder a esa pregunta.

Con 16 episodios en la tercera temporada, ¿sois conscientes de esa historia más larga? ¿O, en cambio, os centráis en los episodios individuales?

Nuestra audiencia parece frustrarse si una historia tiene un arco muy largo. Ha sido importante que cada episodio tuviese impacto. Para la historia a la larga, considero "Breaking Bad" un gran modelo. Creo que Vince Gilligan es un gran talento. Cada episodio está increíblemente bien hecho, y sin embargo hay un arco grande. Nunca sientes que los episodios sean de relleno. Así que espero eso sea algo que podamos conseguir, algo que hemos estado intentando hacer.

¿Cómo ves a Rick como protagonista? A veces parece un poco superado.

No olvidemos que casi perdió la vida, que estuvo en coma. Se despierta en un mundo donde le han quitado casi todo. Incluso la fidelidad de su matrimonio. Creo que ha intentado recomponerse y arreglar todo. Ahora siente que tiene una respuesta. Pero, como hemos visto, cada vez que tiene una respuesta, resulta ser errónea. Así que esperamos poder seguir torturándole durante la tercera temporada.

Michael Rooker dice que volverá en la tercera temporada. ¿Es eso cierto?

Diré esto: creo que Merle sigue vivo y coleando, y sería una gran adición a la serie. No quiero confirmarlo, pero responderé a esa pregunta con un guiño.

Vimos un poco a Michonne rescatando a Andrea. ¿Cómo crees que encajará en el reparto?

Es interesante. Tenemos una gran trama que la une en un modo sorprendente. Que se implique o no con la gente de la granja es algo que está por ver.

En la finale vimos de nuevo el misterioso helicóptero del piloto. ¿Es algo que entrará en juego en la próxima temporada?

Estamos muy interesados en descubrir qué pasa con ese helicóptero. Es todo lo que puedo decir.

Matásteis a dos personajes principales en episodios consecutivos. Nadie está a salvo.

Eso es lo que creemos en la serie. Mientras continuamos matando personajes, tenemos que traer otros nuevos y hacer que la audiencia se implique con ellos. Esa es parte de la meta de la tercera temporada: abrir el mundo, hacerlo menos claustrofóbico, y asegurarnos de tener muchos personajes que importen a la gente.

¿T-Dog tendrá más presencia el año próximo? Es el personaje al que menos conocemos.

Hay un plan para él. Dadas las cosas en las que he tenido que centrarme para desarrollar la serie en el que creía era el mejor modo, T-Dog quedó a un lado. Nos ocupamos de todo ello, y ahora podemos centrarnos en Michonne, el Gobernador, T-Dog y todos esos personajes. Los fans de T-Dog van a estar contentos. No nos interesa tener a un personaje de fondo con una frase por episodio. Eso se ha acabado. Teníamos espacio limitado, y para mí era importante contar la historia de Rick.

¿Hay algo que quieras trabajar más en la tercera temporada?

Creo que la clave es abrirse. Seguir buscando nuevos modos de aterrorizar a la audiencia, a los fans. Creo que para el final de esta temporada la gente estaba al límite, preguntándose cuanto miedo más podrían aguantar. Queremos asegurarnos de que estén inmersos en el mundo de "The Walking Dead", y nunca se esperen los golpes.